El turismo es una de las industrias de mayor importancia en el mundo. Este sector genera encadenamientos
significativos con otros sectores de la producción y los servicios en muchos países, por lo que se le considera
un eje estratégico del crecimiento económico, social y cultural de los pueblos. Se estima que contribuye a su
estabilidad monetaria -vía generación de divisas- y al cambio de la matriz productiva.